El espacio cripto acaba de presenciar otra tendencia perturbadora: estafadores experimentados que apuntan a jóvenes creadores de contenido para lanzar tokens de rugpull. Surgieron informes sobre un individuo mayor que supuestamente manipuló a un streamer adolescente para presentar un esquema de token que inevitablemente colapsó. Esto no es un caso aislado; se está convirtiendo en un patrón. Los recién llegados vulnerables con alcance en redes sociales pero sin ninguna alfabetización financiera están siendo utilizados como hombres de frente desechables. Estos depredadores entienden el manual: explotar la confianza, prometer ganancias rápidas, desaparecer cuando se agota la liquidez. ¿Las víctimas? Tanto el promotor ingenuo que queda con riesgo legal como su audiencia que compró. A medida que la barrera para la creación de tokens cae a cero, estamos viendo tácticas de reclutamiento sacadas directamente de esquemas piramidales clásicos, solo rebrandeados con jerga de blockchain. Vale la pena recordar: los proyectos legítimos no necesitan acorralar a los adolescentes en DMs.
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El espacio cripto acaba de presenciar otra tendencia perturbadora: estafadores experimentados que apuntan a jóvenes creadores de contenido para lanzar tokens de rugpull. Surgieron informes sobre un individuo mayor que supuestamente manipuló a un streamer adolescente para presentar un esquema de token que inevitablemente colapsó. Esto no es un caso aislado; se está convirtiendo en un patrón. Los recién llegados vulnerables con alcance en redes sociales pero sin ninguna alfabetización financiera están siendo utilizados como hombres de frente desechables. Estos depredadores entienden el manual: explotar la confianza, prometer ganancias rápidas, desaparecer cuando se agota la liquidez. ¿Las víctimas? Tanto el promotor ingenuo que queda con riesgo legal como su audiencia que compró. A medida que la barrera para la creación de tokens cae a cero, estamos viendo tácticas de reclutamiento sacadas directamente de esquemas piramidales clásicos, solo rebrandeados con jerga de blockchain. Vale la pena recordar: los proyectos legítimos no necesitan acorralar a los adolescentes en DMs.