¿Algunas de mis mejores llamadas? Las publiqué en vivo en el feed para que todos las vean.

Cuando las operaciones salieron mal, asumí la responsabilidad públicamente—probablemente sufrí más que cualquier persona que miraba. Así es como se ve la verdadera transparencia.

¿Las ganancias? No solo tomé una captura de pantalla y presumí. Dividí las ganancias con las personas que habían estado a mi lado.

Nunca jugué el juego de ocultar pérdidas y solo mostrar ganancias. Simplemente lo mantuve auténtico: información de calidad sin el habitual libro de jugadas de los influencers para exprimir seguidores por ventas de cursos o esquemas de pump-and-dump. Ese es el estándar al que me someto. 🫡