El vaivén del jueves en las acciones de EE. UU. te dice todo sobre la psicología del mercado en este momento. Nvidia soltó números absolutamente monstruosos — del tipo que deberían haber provocado un rally — sin embargo, los operadores se apresuraron a salir. Un estratega senior en una importante firma de Wall Street señaló que en lugar de interpretarlo como una señal de "todo claro" para los activos de riesgo, el mercado lo interpretó como una razón más para cubrir la exposición a la baja. Un caso clásico de que las buenas noticias no son lo suficientemente buenas cuando el sentimiento ya es frágil.