El autor de "Padre rico, padre pobre", Robert Kiyosaki, hizo un gran movimiento el pasado viernes: vendió bitcoins por un valor de 2,25 millones de dólares.

Pero lo interesante es que no lo hizo porque sea bajista.

Compró estos bitcoins hace años, cuando el precio rondaba los 6.000 dólares, y ahora los vendió cerca de los 90.000 dólares, obteniendo un beneficio de varias veces su inversión. ¿La razón de la venta? Planea invertir ese dinero en dos centros quirúrgicos y un negocio de vallas publicitarias; según sus cálculos, estos proyectos físicos le generarán un flujo de caja mensual libre de impuestos de 27.500 dólares a partir de febrero del próximo año.

Lo más importante es que Kiyosaki no ha cambiado en absoluto su visión sobre las criptomonedas. Afirma que sigue siendo muy optimista respecto a bitcoin; esta operación es solo una conversión de activos digitales a activos físicos que generen un flujo de caja constante, y luego planea reinvertir las ganancias de estos negocios en el mercado cripto de manera sistemática.

Este mes también reiteró su predicción: bitcoin podría alcanzar los 250.000 dólares en 2026. Así que esta retirada de beneficios parece más bien un ajuste en la asignación de activos: asegurar beneficios primero y luego reinvertir las ganancias poco a poco, una jugada típica de mentalidad de rico.

¿Y cuántos bitcoins le quedan? Esta vez no lo ha dicho, solo ha revelado la cantidad que ha vendido.