Se rumorea que el secretario del Tesoro, Scott Bessent, está preparando la introducción de una nueva norma que exigiría a los presidentes regionales de la Reserva Federal residir realmente en los distritos que supervisan—y no solo para una foto rápida, sino durante al menos tres años.

Este movimiento podría cambiar la forma en que opera el liderazgo regional de la Fed. Actualmente, no existe un mandato estricto de residencia, lo que según los críticos crea una desconexión entre los responsables de las políticas y las economías locales a las que supuestamente representan. Al obligar a los jefes regionales a arraigarse en sus territorios, Bessent parece estar impulsando una mayor responsabilidad y un conocimiento más directo de las condiciones económicas regionales.

¿Por qué esto importa más allá de las finanzas tradicionales? La política de la Fed influye directamente en los tipos de interés, la liquidez y el apetito por el riesgo en todas las clases de activos—incluyendo las criptomonedas. Cuando los presidentes regionales tienen lazos más profundos con sus distritos, sus recomendaciones de política podrían reflejar mejor las realidades locales en lugar de modelos macroeconómicos abstractos. Esto podría traducirse en decisiones de política monetaria más matizadas, cuyos efectos se extenderían también a los activos digitales.

Queda por ver si esta propuesta gana impulso, pero señala un impulso más amplio hacia la reforma de cómo funciona el sistema de banca central de Estados Unidos a nivel de base.