En el círculo de amigos siempre aparecen esas capturas de pantalla de “diez veces en tres días”. Pero, ¿sabías que realmente, de cada diez personas que sobreviven más de medio año en este mercado, tal vez solo hay una?

He visto un ejemplo clarísimo.

El año pasado conocí a un principiante que tenía 1200 U. Cuatro meses después, la cifra en su cuenta se convirtió en 25.000, y ahora se mantiene algo por encima de 38.000. No ha usado apalancamiento, no ha perseguido modas, e incluso la mayoría del tiempo ha estado “sin hacer nada”. ¿Suena increíble? En realidad, el método es peligrosamente simple.

**Primero: divide el dinero en tres partes**

1200 U no es mucho, pero no lo metas todo de golpe. Divídelo en tres lotes de 400 U:
- El primero para operar a corto plazo, como mucho una operación al día; cuando alcanzas el precio objetivo, te sales, sin avaricia;
- El segundo para esperar movimientos de medio plazo; no toques esos mercados que solo oscilan durante tres o cinco días, espera a que salga una tendencia clara, donde puedas ver al menos un 10% de margen;
- ¿El tercero? Intocable. No lo muevas. Es tu última bala, para recuperarte si el mercado se desploma.

La mayoría de la gente liquida su cuenta no por falta de técnica, sino porque apuesta todas sus fichas de una sola vez. El mercado no va a esperar a que estés preparado, pero tú tienes que dejarte una vía de escape.

**Segundo punto clave: no mires la pantalla todo el día**

El 80% del tiempo el mercado está tonteando, subiendo y bajando unos pocos puntos sin sentido. Hice que ese amigo se pusiera una regla: si una moneda principal está lateral más de tres días, cierra la aplicación directamente. ¿Esperar qué? Espera a que rompa el rango de consolidación o que supere una media móvil clave; cuando la tendencia sea clara, entonces entras.

Otra regla de oro: cuando la cuenta gane más del 20% sobre el capital, retira un 30%. Asegura el beneficio, eso no es de cobardes, es darte un colchón psicológico. Verás que, con dinero en mano, tu mentalidad al abrir nuevas operaciones es totalmente distinta.

**Último consejo: usa reglas para controlar tus emociones**

Pon tres reglas inquebrantables, escríbelas y pégalas delante de la pantalla:
1. Stop loss del 2%. Si llega, vende, aunque luego rebote, no mires atrás;
2. Si ganas un 4%, reduce la posición a la mitad, y deja correr el resto;
3. Si pierdes, jamás aumentes la posición. “Bajar el coste medio” es el autoengaño más peligroso.

No necesitas acertar siempre con la dirección, pero sí ser implacable en la ejecución. Los que ganan dinero no son los que predicen mejor, sino los que saben cuándo estar callados.

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La verdad, convertir 1200 U en 38.000 suena a cuento de motivación. Pero si lo piensas bien: este chico en cuatro meses solo hizo tres cosas: dividir el dinero, esperar la oportunidad y seguir las reglas. No hay técnica avanzada, simplemente priorizó “sobrevivir” antes que “ganar rápido”.

Si ahora sigues perdiendo el sueño por variaciones de unos cientos de U, o no sabes cómo repartir el capital o identificar tendencias, tal vez deberías parar y pensar: ¿de verdad quieres ganar dinero, o solo quieres apostar?

En este mercado no faltan oportunidades, faltan personas que sepan esperar a que lleguen. Ahorrarte un rodeo a veces solo depende de entender “cómo ser estable”, no “cómo ser rápido”.