Una cosa que acaba de suceder. Un hacker intentó usar 1 billón de dólares para hacer un dump, pero al final perdió solo las tarifas y se fue corriendo. 😂

Detrás de esto en realidad está el viejo problema del DeFi tradicional: los ataques de préstamos flash. La estrategia es muy simple: en el mismo bloque, manipular el precio 100 veces, tomar todos los activos prestados, luego hacer un dump y devolver el préstamo. Con un solo combo, se vacía el pool de liquidez de los usuarios. Antes, este tipo de cosas prácticamente no tenían solución.

Esta vez, es diferente. El hacker apuntó a un nuevo protocolo de préstamos que usa el oráculo APRO. Todo estaba preparado: la lógica era: pedir prestado → manipular el precio → hacer el dump → devolver el préstamo. Parecía perfecto.

Pero cuando intentó manipular el precio, surgió el problema. El oráculo no se movió.

¿Y por qué? Porque el mecanismo TVWAP de APRO funcionó. Este mecanismo al ver los datos se alegró: "¿El precio en un DEX subió 100 veces, pero solo con tu propio volumen? ¿El precio en otros exchanges no cambió?" Inmediatamente detectó la anomalía y eliminó ese dato.

El precio en la cadena permaneció allí, silencioso, sin ningún movimiento. La lógica de arbitraje del hacker quedó completamente invalidada. Las tarifas de préstamos flash y el Gas ya se habían consumido — y al final, perdió varios miles de U, y se fue con la cola entre las piernas.

Eso es la verdadera fortaleza del oráculo. No le importa cuánto se manipule el precio, solo verifica si hay volumen de transacción real que lo respalde. ¿Quieres engañarlo? A menos que compres toda la liquidez del mercado.

Los protocolos protegidos con este tipo de oráculos, pueden dormir tranquilos por la noche.