¡Cuidado con las trampas de estafa! Ninguna plataforma de seguimiento de datos conocida te enviará mensajes privados de forma proactiva. Si alguien afirma representar a esa plataforma y te pide que hagas una transferencia, en nueve de cada diez casos es una estafa. Recuerda una regla de oro: cualquier solicitud que implique una transferencia debe ser pensada dos veces y verificar la identidad a través de múltiples fuentes. Protege tus fondos y no dejes que un descuido te haga caer en una estafa de phishing. En este mundo de oportunidades que es Web3, la prudencia nunca pasa de moda.