Cuando el mercado sube, algunos empiezan a alardear diciendo que la tendencia va a arrancar; cuando baja, cambian de opinión y dicen que es una corrección normal; y cuando hay consolidación, aún más absurdo—lo califican directamente como una limpieza de liquidez por parte de los grandes. Este tipo de discurso parece explicar todo, pero en realidad no dice nada.

Lo más gracioso es que una gran cantidad de personas pasan todo el día garabateando en los gráficos de velas, hablando de niveles de soporte, resistencia, rupturas de patrones, como si se convirtieran en enciclopedias. Los indicadores técnicos llenan la pantalla, y analizan con mucha autoridad. Pero en el fondo, ¿qué están haciendo? La mayoría de los que siguen la tendencia en realidad solo están apostando a que el precio suba o baje, es un simple juego de dirección.

Los jugadores que realmente han comido bien en el mercado ya se están riendo y viendo la escena. Ya han obtenido beneficios y salido del mercado, y los que quedan afuera persiguiendo las subidas y bajadas, ¿no son solo liquidez para los demás? Aunque los análisis técnicos sean variados y elaborados, la esencia del mercado nunca cambia: asimetría de información y diferencias en la percepción.