Las predicciones colectivas optimistas a principios de 2025 son un poco incómodas: actualmente, el mercado ha sido mucho más realista sobre qué posición podría alcanzar Bitcoin el próximo año. Sin embargo, según las voces ya expresadas, la mayoría sigue siendo alcista, solo que con argumentos más sólidos.
Tom Lee, Standard Chartered, Bernstein, JPMorgan y Citigroup, estas instituciones de peso, han dado recientemente rangos de precios para 2026, concentrándose en torno a los 150,000 a 250,000 dólares. Estas cifras no son fruto de una ocurrencia, sino que están respaldadas por varias cadenas lógicas claras.
Primero, la expectativa de expansión del capital institucional. La asignación de fondos por parte de grandes instituciones continúa, pero en esta ocasión con movimientos más cautelosos pero más firmes. En segundo lugar, la entrada constante de fondos en los ETF de contado sigue siendo un factor importante: la misma fuerza que impulsó los precios el año pasado sigue en marcha este año. El último factor clave es la clarificación regulatoria. La mejora en las expectativas políticas reduce directamente el peso del riesgo para las instituciones, lo cual es crucial para decisiones de asignación de grandes sumas.
Las opiniones de observadores del sector como Arthur Hayes e IOSG también encajan en este marco, cada uno con diferentes enfoques pero con una dirección general coherente. Desde la pérdida de precisión colectiva a principios de año hasta el optimismo cauteloso actual, el mercado realmente está aprendiendo a ver estas predicciones con mayor racionalidad.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
9 me gusta
Recompensa
9
5
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
GasFeeCryBaby
· hace8h
¿15 a 25 mil? Decirlo bonito, no es más que juego de azar con otro nombre. La entrada en ETF no da para mucho...
Ver originalesResponder0
RamenStacker
· hace8h
Hmm… el número de 150,000 a 250,000 suena todavía un poco conservador, ¿no? ¿Estas instituciones no quieren ser un poco más prudentes?
Ver originalesResponder0
BearMarketSurvivor
· hace8h
El rango de 15-25w, para ser honesto, es un poco conservador. ¿Realmente se atreven esas grandes instituciones a apostar?
Ver originalesResponder0
RektHunter
· hace8h
¿15 a 25 mil? Estas instituciones también son muy buenas dejando vías de escape para ellas mismas, en fin, ¡este rango es lo suficientemente amplio jaja!
Ver originalesResponder0
ReverseTrendSister
· hace8h
Jugar en este rango de 150,000 a 250,000, las instituciones realmente han comenzado a tomárselo en serio. Pero solo quiero preguntar, ¿cuánto tiempo podrá mantenerse esta cadena lógica esta vez?
Las predicciones colectivas optimistas a principios de 2025 son un poco incómodas: actualmente, el mercado ha sido mucho más realista sobre qué posición podría alcanzar Bitcoin el próximo año. Sin embargo, según las voces ya expresadas, la mayoría sigue siendo alcista, solo que con argumentos más sólidos.
Tom Lee, Standard Chartered, Bernstein, JPMorgan y Citigroup, estas instituciones de peso, han dado recientemente rangos de precios para 2026, concentrándose en torno a los 150,000 a 250,000 dólares. Estas cifras no son fruto de una ocurrencia, sino que están respaldadas por varias cadenas lógicas claras.
Primero, la expectativa de expansión del capital institucional. La asignación de fondos por parte de grandes instituciones continúa, pero en esta ocasión con movimientos más cautelosos pero más firmes. En segundo lugar, la entrada constante de fondos en los ETF de contado sigue siendo un factor importante: la misma fuerza que impulsó los precios el año pasado sigue en marcha este año. El último factor clave es la clarificación regulatoria. La mejora en las expectativas políticas reduce directamente el peso del riesgo para las instituciones, lo cual es crucial para decisiones de asignación de grandes sumas.
Las opiniones de observadores del sector como Arthur Hayes e IOSG también encajan en este marco, cada uno con diferentes enfoques pero con una dirección general coherente. Desde la pérdida de precisión colectiva a principios de año hasta el optimismo cauteloso actual, el mercado realmente está aprendiendo a ver estas predicciones con mayor racionalidad.